Carolina Gomes
Mami,
No hay un día en el que Fiorella y yo te extrañemos mucho. Siempre será un dolor en nuestras vidas que no pudimos abrazarnos luego de 24 años. Te amamos, y te abrazamos en nuestro corazón como esa última vez.
Nos haces falta mamita. Siempre serás la luz que guie nuestra vida. Descansa en paz.

